Este libro aborda la relación entre los trastornos del estado de ánimo y las enfermedades vasculares, un tema de gran importancia en la salud pública debido a su alta prevalencia y su impacto negativo en la salud general de los pacientes. A pesar de la existencia de numerosos estudios, aún no hay un enfoque clínico claro para psiquiatras, médicos, geriatras y neurólogos. Este trabajo presenta una revisión exhaustiva y actualizada del tema, ofreciendo una valiosa fuente de referencia para clínicos e inspirando futuras investigaciones.