Cuando Jack Flowers, Alias Jack Fiori, se dej ̤caer por Singapur, no tard ̤en aprenderlo todo acerca de puertos y gentes que viven en los confines del mundo, como en aquella penn̕sula al sur de Indochina y en aquellos buenos tiempos en que sus burdeles, casas de masaje y espectc̀ulos eran el centro de diversin̤ de toda Asia. A veces marinero, otras abastecedor de barcos, otras simplemente golfo y otras an︢ alcahuete, honesto y generoso, Jack poda̕ ofrecer cualquier cosa a los turistas y jactarse de no defraudarlos jams̀. Haba̕ sido el joven ms̀ bebedor del Bandung Club, pero ahora, ya cincuentn̤, es toda una institucin̤ en la ciudad. Mientras otros nùfragos de la vida como ľ empiezan a temer una muerte sr̤dida en aquella tr̤rida isla tropical, Jack sigue esperando la realizacin̤ del perfecto sueǫ mg̀ico y, para ello, convierte la fantasa̕ en realidad cotidiana, lejos de aquel puerto roǫso, lleno de cucarachas y tan cercano a esa guerra infame que lo corroe todo