Medidas
96 cm altura x 76 cm frente (con marco)
82 cm altura x 62 cm frente (sin marco)
La Divina Pastora es una advocación de la Virgen María representada como Pastora de las Almas, Pastora celestial.
Aunque hay antecedentes de la representación de la Virgen como Divina Pastora de Almas, no será hasta 1703 cuando el fraile capuchino Fray Isidoro de Sevilla, después de una visión de la Virgen, encargue un lienzo al artista Alonso Miguel de Tovar, con la siguiente descripción:
“En el centro y bajo la sombra de un árbol, la Virgen santísima sedente en una peña, irradiando de su rostro divino amor y ternura. La túnica roja, pero cubierto el busto hasta las rodillas, de blanco pellico ceñido a la cintura. Un manto azul, terciado al hombro izquierdo, envolverá el entorno de su cuerpo, y hacia el derecho en las espaldas, llevará el sombrero pastoril y junto a la diestra aparecerá el báculo de su poderío. En la mano izquierda sostendrá al Niño y posará la mano derecha sobre un cordero que se acoge a su regazo. Algunas ovejas rodearán la Virgen, formando su rebaño y todas en sus boquitas llevarán sendas rosas, simbólicas del Ave María. En la lontananza una oveja extraviada era perseguida por el lobo, pero pronunciado el Ave María, aparecía San Miguel con la flecha que hunde en la testuz del lobo maldito".
Firmado en el ángulo inferior derecho por el pintor Pedro García.